LAS BRUJAS NO EXISTEN
Cristina
cuando era pequeña acreditaba en brujas, que son mujeres malvadas, según ella,
que pasan todo el tiempo imaginando o ideando cosas perverso o absurdo. Sus amigos
también acreditaban en la brujería. Al final de la casa de cris, vivía una mujer
solterona, vieja y era una mujer muy amargada, que se llama tía catana, pero
nosotros la considerábamos como ¨bruja¨. Era una señora muy gorda, enorme, su
pelo se parecía a un bosque, la oreja a un abanico, los ojos a una bola de
tomate, su nariz es largo y tenía una enorme verruga en la barbilla. Ella hablaba
siempre sola, nunca entramos en su casa pero teníamos la certeza de que hablaba
sola, porque se lo oía siempre que nosotras pasábamos por allí, se entráramos
en su casa le encontraríamos a preparar veneno en una enorme caldero, por lo
que decidimos que no.
Nuestro interés
era incomodar-la, la manera perfecta que teníamos fue invadir el patio pequeño que
elle tenía que estaba lleno de fruta y robamos fruta que allí se encontraba,
por casualidad la anciana se dirigió a la calle para comprar algo en una
pequeña tiene cerca de su casa y nosotros corríamos detrás de ella gritando: *bruja,
bruja vente de nuestra calle no te queremos*.
Un día nos
encontramos con una cabra muerte. Nosotros no sabíamos a quien pertenecía el
animal, pero se nos ocurrió una idea: tirarlo en la casa de la bruja, porque
ella había dejado la ventana abierta, le dijimos a Joao pedro que era nuestro líder
que lo tirara en la ventana de la bruja, el animal era enorme y muy pesado, con
mucho esfuerzo lo levantamos entre todos. Tenemos que irnos antes de que aparezca la bruja – dijo Joao Pedro.
Y la bruja apareció en el momento exacto cuando finalmente introducíamos la
cabra en su casa, ella abre la puerta se decir nada empieza a barrer la casa y riendo-se,
mientras nosotros salíamos oyendo dijo: cris.
Cris de
repente se caía y se hace una herida muy grande. Y la bruja de lejos la observo,
movió la cabeza, se acercó hacia cris, pero no la hizo nada, porque vio que la
joven está muy mala, la levantó y la llevo en un lugar cómodo para curarla. La curo
al día siguiente cris se despertó sin dolor y sin ninguna macha de herida. Cris
arrepentida de todo lo que hicieron a su vecina, fue a la casa de la persona a
la que le llamaban de bruja y le dijo: lo siento por todo daño que te hemos
causado. La anciana se levantó y la dio dos besos. Desde allí cris dijo que no
existe bruja en el mundo, para ella.
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