Somos dueños de nuestra propia vida?
El caso de la familia Downes hizo reflexionar al mundo un julio de 2009. Uno de los más respetados directores de orquesta del Reino Unido, sir Edward Thomas Downes, y su esposa, Joan, se suicidaron en un centro de eutanasia de Suiza. Sus muertes conmovieron a Europa y abrieron el debate sobre la eutanasia. Edward de 85 años y su esposa Joan de 74 decidieron morir en paz en las circunstancias que ellos mismos eligieron a causa del cáncer cerebral que fue encontrado a la mujer en septiembre del año anterior. La pareja decidió acabar con sus vidas juntos antes de malvivir con graves problemas de salud.
El caso de la familia Downes hizo reflexionar al mundo un julio de 2009. Uno de los más respetados directores de orquesta del Reino Unido, sir Edward Thomas Downes, y su esposa, Joan, se suicidaron en un centro de eutanasia de Suiza. Sus muertes conmovieron a Europa y abrieron el debate sobre la eutanasia. Edward de 85 años y su esposa Joan de 74 decidieron morir en paz en las circunstancias que ellos mismos eligieron a causa del cáncer cerebral que fue encontrado a la mujer en septiembre del año anterior. La pareja decidió acabar con sus vidas juntos antes de malvivir con graves problemas de salud.
Tras casos como este muchos países decidieron que la práctica de la eutanasia fuera ilegal como es el caso de España pero otros países mantuvieron aceptar cierta tolerancia siempre y cuando se respeten algunas reglamentaciones ; este es el caso de Alemania, Bélgica, Canadá... Antes de dar mi opinión sobre el aspecto legal de la eutanasia, me parece oportuno explicar dicho tema.
La Real Academia Española define a la eutanasia como la acción u omisión que acelera la muerte de un paciente desahuciado, con o sin su consentimiento (como el caso del coma), con la intención de evitar sufrimiento y dolor.Es decir, la eutanasia es una intervención creada para poner fin a la vida de un paciente que no puede ser curado.La eutanasia se presenta como una solución adecuada en relación con algo -el sufrimiento- que constituye uno de los grandes misterios de la existencia humana, pero que en nuestra civilización resulta especialmente indigerible.La práctica de la eutanasia puede clasificarse según varios criterion como pueden ser intención de causar la muerte, el modo en que se procede (es decir por acción o por omisión) y el consentimiento del paciente. podemos distinguir entonces distintos tipos de eutanasia:
-Eutanasia directa: cuando las acciones que se realizan sobre el enfermo tienen la intención de provocar su muerte.
-Eutanasia indirecta: cuando no se tiene como intención acortar la vida del paciente sino aliviar su sufrimiento.
-Eutanasia voluntaria: cuando un individuo que tiene las capacidades físicas y mentales para pedir que lo ayuden a morir lo ha pedido.
-Eutanasia no voluntaria: cuando el individuo ya no posee las capacidades físicas y mentales para pedir que lo ayuden a morir pero expresó previamente que esa era su voluntad.
Dicho esto, me gustaría finalizar diciendo que en el caso de la eutanasia,mi opinión es que su legalización traería consigo una sociedad en la que los ciudadanos viviríamos mucho peor. Cuando se establece como legal la posibilidad de provocar directamente la muerte a una persona -es en esto en lo que consiste la eutanasia- suceden cosas bastante catastróficas. La posibilidad de generar una sociedad (a ello contribuiría la legalización de la eutanasia) en la que las personas severamente enfermas o dependientes se percibieran a sí mismas como una carga y un estorbo, entonces no habría motivos para justificar que la eutanasia fuera un deber. En mi opinión el verdadero fundamento del derecho a «morir dignamente» es la decisión de quien desea abandonar este mundo, es decir, una decisión totalmente subjetiva. La eutanasia también crearía una pendiente peligrosa en contra de la vida en otros campos a parte del medicinal,como por ejemplo holanda donde la eutanasia se aplica no ya a enfermos, sino simplemente a gente que no quiere vivir Los médicos insisten en que la eutanasia, como el aborto, no son actos médicos, ya que el fin de la medicina es curar, y si no se puede curar al menos aminorar el dolor, y en todo caso atender y acompañar. La eutanasia no cura nada. Por estas razones creo que la legalización de la eutanasia sería una mala decisión. Tan sólo generaría más muertes innecesarias y nadie quiere eso.
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